Personas por la Etica en el Trato de los Animales (PETA) insta a todo el mundo a evitar las corridas de toros. No es divertido ver cómo un animal inocente es torturado y enloquecido ante una multitud que grita y a la que debería caérsele la cara de vergüenza. Incluso aunque nos vayamos tras 15 ó 20 minutos, el daño ya se habrá hecho: nuestro dinero se habrá destinado a la ayuda de este diabólico negocio, al que la gente decente está tratando de poner fin. Los manipuladores debilitan a los toros durante días antes de la corrida. Ponen laxantes en sus comidas y pesadas bolsas de arena en sus lomos; les afilan los cuernos hasta que su punta es muy fina; los drogan; en el ruedo, les clavan lanzas en los músculos del lomo y del cuello, de tal modo que no puedan levantar la cabeza. Cuando el matador aparece, el toro está incluso más débil debido a la pérdida de sangre y también más aturdido por haber sido perseguido en círculos. Los caballos utilizados en las corridas de toros son viejos y normalmente están drogados. Les llenan las orejas con papel de periódico mojado y normalmente les cortan las cuerdas vocales, para que el público no oiga sus gritos. Llevan amplias mantas para ocultar sus vísceras, que salen al exterior cuando los cornean y los destripan. Por favor, ayudemos a estos pobres animales: evitemos las corridas de toros y manifestémonos en contra de ellas en público.
Hace 18 horas
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